Una cuadrilla de pintoras para convocar al paro #8M

Las paredes de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires andan diciendo: Paro Internacional de Mujeres, Lesbianas, Travestis y Trans. Un grupo de pintoras se organiza para intervenir el espacio público y convocar a la huelga feminista que será en marzo.

En diciembre, durante la muesta de la artista feminista Fátima Pecci Carou,”Kosupure Cosplay”, entre el grupo de colegas que habían ido a verla, comenzaron a pintar consignas en las paredes de la galería de arte Selvanegra, en el barrio porteño de Villa Crespo. No eligieron frases al azar.”Paro Global de Mujeres”, “Educación Sexual Integral”, escribieron. Y dibujaron en la pared una MyMelody guerrera y encapuchada con una katana acompañada de “Ni Una Menos”. La convocatoria al #8M ya estaba latiendo entre las artistas organizadas alrededor de Nosotras Proponemos. 

El año pasado en la antesala del #8M seis activistas de Ni Una Menos fueron criminalizadas por hacer tareas de propaganda Por eso, desde el colectivo Ni Una Menos pensaron en convocar a distintas personas que cedan paredes para poder pintar consignas sobre el Paro Internacional de Mujeres, Lesbianas, Travestis y Trans. Cuando empezaron a llegarles mensajes con distintas personas cediendo las paredes emergió la idea de artícular y organizar una Cuadrilla de pintoras.

“Somos artistas pero acá pintamos todas, están invitadas todas las que no lo son. Y también somos una Cuadrilla. Puede ser una Cuadrilla de electricistas o de pintoras: vamos con los pinceles te pintamos la pared y nos vamos”, dice Catalina Perez Andrade en diálogo con LATFEM. Es una de las integrantes de la cuadrilla de pintoras, que ya dejó su huella en distintas galerías porteñas de Villa Crespo: Nora Fisch, Selvanegra y Zmud. También pintaron una “pared amiga”, en el frente de la periodista holandesa Silvia Rottemberg, en Colegiales, que cedió el espacio para esa acción. De acá al 8 de marzo planean seguir haciendo murales todas las semanas en nuevas paredes y en más galerías y espacios culturales de la Ciudad, como por ejemplo en Alto Refugio de la artista Ana Vogelfang. La activididad incluirá charlas sobre micromachismos, se imprimirán fanzines sobre la temática. Además, habrá una presentacion de La Maldonada, que cuenta la historia de una de las primeras feministas de la Colonia, en tiempos de la primera fundación de Buenos Aires. “El arroyo Maldonado, entubado a metros de Alto Refugio, lleva su nombre por ella. Estamos haciendo una película que se va a proyectar ese día”, contó Vogelfang a LATFEM.

La Cuadrilla también irá a pintar en el conurbano. Y uno de los próximos murales será en la villa 21-24 donde el colectivo Ni Una Menos también proyecta realizar una asamblea de cara al Paro.

La Cuadrilla también irá a pintar en el conurbano. Y uno de los próximos murales será en la villa 21-24 donde el colectivo Ni Una Menos también proyecta realizar una asamblea de cara al Paro.

Cuando las ven con pinceles en mano, es usual que pase alguna persona que saca su chapa de defensor de paredes. “Siempre pasa alguien y nos pregunta si está habilitada”, cuenta la pintora.

Los murales feministas de la Cuadrilla de pintoras deben pensarse en línea con una multiplicidad de acciones que se están desarrollando en todo el mundo y especialmente en América Latina y el Caribe como estrategia de difusión de la huelga feminista. En Paraguay armaron un equipo de visitas que recorre los lugares de trabajo de quienes no pueden participar de las plenarias o asambleas, en otros países las feministas se suben a los colectivos a hablar del paro con otras. Ese diálogo también está abierto cuando la Cuadrilla de pintoras entra en acción: las personas se acercan a preguntarles a qué convocan y ellas aprovechan a invitarlas a las asambleas y a pensar acciones para el #8M.

 

Y, a su vez, es necesario mirar estas acciones con distintos hechos que traccionaron acciones y organización en el ámbito del arte local.  Uno de ellos es la muerte de la rosarina Graciela Sacco, el año pasado. “Esta noticia nos toca por diversas razones, sobre todo a las artistas mujeres, que la tenemos bien difícil en la escena cultural local. No me dan ganas de enumerar penurias, pero sí de proponer algunos puntos para tener en cuenta en nuestras prácticas”, escribió en su Facebook la artista Leticia Obeid. Sus palabras provocaron un debate virtual intenso entre artistas, activistas y académicas. Del diálogo surgió un manifiesto, subido a google docs, que desarrolló 37 puntos divididos por temas: Compromiso de práctica artística feminista  En esa proclama se consolidó una organización: la Asamblea Permanente de Trabajadoras del Arte.

La Cuadrilla de pintoras también puede enmarcarse en diversas iniciativas feministas que han tomado el espacio público por asalto para que las demandas del activismo estén presentes en las ciudades que habitamos: Mujeres Públicas en Argentina, Mujeres Creando en Bolivia, Mujeres Artistas en Movimiento de Uruguay y La Perrera, en Perú.

“¿Cómo hinchan con esto de las mujeres?”, escuchó el otro día Catalina Perez Andrade frente a uno de los murales. Cada tanto aparecen los comentarios de rechazo, pero las pintadas se siguen multiplicando en la Ciudad de Buenos Aires para agitar a muchas más a unirse a la huelga.