El 21 de agosto de 1971, un equipo de 17 mujeres argentinas jugó el Mundial de México, sin botines ni entrenador y con una sola camiseta a la que cada una le cosió el número. Sin apoyo ni financiamiento viajaron hasta la Ciudad de México y le ganaron a Inglaterra 4 a 1. Los cuatro goles fueron de Elba Selva ante un estadio Azteca colmado: había 110.000 personas. Se convirtieron en las próceres del fútbol femenino.
Para rescatar esa historia épica del fútbol femenino, y a modo de homenaje, la organización Pioneras del Fútbol Femenino propone esta fecha como el Día de las Futbolistas como una forma de pelear contra la invisibilización del lugar que ocupan las identidades feminizadas en este deporte.
La idea del rescate fue de Lucila Sandoval, ex jugadora de fútbol y una de las impulsoras de Pioneras. Llevaron la iniciativa a la legislatura porteña y durante la jornada de hoy harán una acción en redes sociales para visibilizar esta demanda con el Hashtag #21DeAgosto.