“Los celos son una prueba de que hay amor”, “El control del celular evita la infidelidad”, “Hay celos buenos y malos”: los imaginarios sociales que existen alrededor de los celos son nocivos para las relaciones de pareja, especialmente para las identidades femeninas. En Bolivia la campaña “Actúa” reunió a jóvenes activistas de todo el país para pensar cómo desarmar estos imaginarios sociales nocivos que existen frente a las relaciones sexo-afectivas desde el paradigma patriarcal del “amor romántico”.
En Bolivia, según datos de la campaña, el 32 % de los y las jóvenes entre los 15 y 25 años creen que los celos son una forma de amor, el 42 % cree que controlar el celular de la pareja previene la infidelidad y el 31 % cree que si una chica realmente está enamorada lo perdona todo. A estas cifras preocupantes se suma que el 38 % de los y las jóvenes en Bolivia creen que las mujeres provocan violencia sexual por su manera de vestir.
Los y las jóvenes bolivianas crearon una campaña en redes sociales para mostrar cómo los celos son formas de violencia machista en las parejas. La campaña surgió como un experimento social: citaron a un grupo de parejas de jóvenes y las entrevistaron sobre sus comportamientos en pareja. Luego las mismas parejas fueron confrontadas con el testimonio de una mujer sobreviviente de violencia machista. Muchas de las palabras usadas por la mujer fueron las mismas que los y las jóvenes usaron para hablar de sus comportamientos.
La campaña Actúa, junto con Oxfam, difundieron el registro del vídeo bajo el hashtag #LosCelosNoSonExcusa para abrir una discusión que permita tener relaciones de pareja más sanas, en donde quede claro que no existe justificación para el control y la violencia hacia otras personas.