Mientras en la Universidad del Litoral seis varones cis se preparaban para el debate presidencial televisado, las calles de La Plata desbordaban en 3 kilómetros de diversidad de edades, formaciones, procedencias, trayectorias vitales y un infinito etcétera que no se refleja en las fotos panorámicas pero que puede verse de cerca. La marcha del 34 Encuentro Plurinacional de Mujeres, Lesbianas, Travestis y Trans fue un histórico encuentro de generaciones, identidades y clases. Se trató de la marcha más grande en la historia de la ciudad y de la genealogía de los Encuentros. Cada vez más masivo, convocante, movilizante, con mayores tensiones y discusiones que se traducen en fuerza transnacional e intergeneracional. Un pueblo feminista sin fronteras que ya desborda la imaginación de aquellas feministas que pensaron en reunirse todos los años y empezaron a hacerlo en 1986.
45 minutos antes de la hora pautada de manera oficial la Comisión Organizadora empezó a marchar. Detrás de la bandera de arrastre con aquellas que trabajaron en la organización de este Encuentro tras la insistencia en nombrarlo Nacional y de Mujeres, se encolumnaron las comisiones de años anteriores con los nombres de sus provincias y ciudades en las banderas.
Más atrás, la columna sindical era puro agite. “Unidad de las trabajadoras y al que no le gusta que se joda, que se joda”, se escuchaba en ese tramo del recorrido. La batucada de ATE Capital marcaba el ritmo. También marcharon las empleadas del Poder Judicial, que el día anterior habían participado en el taller de feminismos jurídicos. Fue donde contaron las dificultades que tienen para aplicar la perspectiva de género porque quienes ocupan los lugares de poder son en su mayoría varones cisheterosexuales. Las mujeres, lesbianas, travestis y trans ocupamos las calles y seguimos faltando en los espacios donde se toman las decisiones que impactan en nuestras vidas.
Las pibas llegan al Encuentro cada vez más chicas. En las discusiones sobre Educación Sexual Integral participaron adolescentes de hasta 12 años. Después de hacer política en las aulas, salieron a las calles llenas de glitter a marchar junto a la Campaña por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito. Entre amigas, se abrazaban para saltar juntas. Detrás, las pioneras en la lucha por la legalización del aborto avanzaban sosteniendo la bandera de un reclamo histórico.
“La vida me regaló poder estar en los 34 Encuentros. Y este lo noto masivamente más grande y estamos en un momento de mayor discusión, intercambio y debate. Todo eso hace al crecimiento porque fruto de los Encuentros son todas las leyes que hemos conseguido desde 1986 en adelante, fruto de los Encuentros son las redes, las Campañas que nos han permitido llegar a todo América Latina con la marea verde y poder incidir para que el mundo sea mejor”, dice a LATFEM la abogada Nina Brugo, la mujer de la asistencia perfecta en los Encuentros.
Sobre 60, entre 1 y 2, a las 17.30 h era el punto de encuentro de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito. Media hora después de esa cita nadie se movía porque la multitud era tanta que no se podía, no había lugar. Las madres y personas con chiques a cargo que van al Encuentro insisten en la necesidad que existan espacio de cuidados para niñes.
Más temprano, en la Plaza San Martín, se había hecho la asamblea Abya Yala, la asamblea de los pueblos indígenas latinoamericanos: antipatriarcal, plurinacional y ancestral. La mujer maya, de Guatemala, Lolita Chávez fue una de las voces que se escucharon en esta cita tradicional de los Encuentros. “Nuestros cuerpos son el primer territorio de defensa”, se escuchó en la asamblea, mientras cientos de feministas levantaban los brazos.
Mientras tanto, en Ciudad Autónoma de Buenos Aires, desde el miércoles 9 al mediodía un grupo de mujeres pertenecientes a diversos pueblos-nación indígenas del territorio argentino estaban ocupando el hall de ingreso del Ministerio del Interior a la espera de ser atendidas por el ministro Rogelio Frigerio.
Cerca de la asamblea Abya Yala, las trabajadoras de prensa nos reunimos para debatir en nuestra primera Asamblea Nacional. Fue en la Peatonal Feminista (7 y 54) donde se empezaron a sentar alrededor de la ronda después de las 14 hs. El sol empezaba a salir después de un día de lluvia que impidió el acto de apertura y complicó la llegada de todas pero no frenó el Encuentro.
Las estructuras sindicales todavía son uno de los espacios más machistas. Sin embargo las feministas vamos ocupando espacios de poder y toma de decisión. La voz colectiva de las trabajadoras de prensa resaltó con potencia que las periodistas freelance son las más precarizadas. “Estamos en una situación de mucha soledad. La lucha colectiva es la única salida”, dijo una de ellas con el megáfono en la mano.
“Es muy importante tener en cuenta el contexto en el que sucedió, en este macrismo feroz las trabajadoras fuimos las más despedidas, las más precarizadas y las más invisibilizadas en las agendas y por eso es importante fortalecer las redes que ya existen porque las periodistas feministas y las trabajadoras de prensa hace tiempo que venimos organizándonos. Por eso es importante articular esos espacios, hacerlos federal, compartir agenda, desafíos, experiencias, conocimientos en un modo de hacer para que el gobierno que venga sea progresivo y no regresivo. Es importante que tengamos nuestros derechos laborales funcionando a pleno y nuestros espacios en las agendas mediáticas para dar cuenta de los avances de los feminismos y de nuestras condiciones propias como trabajadoras”, dijo a LATFEM, Poli Sabatés, periodista de Página 12 y Futurock. Delegada gremial por Sipreba.
A partir de los debates y consensos, se decidió repetir esta instancia de manera anual y antes del próximo #8M. También se va a convocar en todo el país a una acción conjunta para el 25 de noviembre, día por la eliminación de las violencias machistas.
A los 5 años Mora consiguió que una sala del jardín al que iba llevara el nombre de su abuela Matilde “Tili” Itzigsohn de 27 años, desaparecida en la última dictadura civico-militar. Este fin de semana Mora estuvo en el Encuentro en su ciudad natal, La Plata, también reivindicando la memoria feminista y haciendo una relectura colectiva de las militantes desaparecidas y sobrevivientes del último gobierno de facto. Mora tiene diez años y es la hija de la periodista feminista Lucía García Itzigsohn. Este fue su segundo encuentro pero fue distinto a Trelew.
Madre e hija marcharon con la misma remera con la inscripción H.I.J.A.S. en el pecho y los pañuelos verdes rodeando las letras. Mora y Lucía García Itzigsohn fueron parte del primer conversatorio en el que las mujeres de la agrupación H.I.J.O.S. A 24 años de la conformación de la Red Nacional de H.I.J.O.S. (Hijas e Hijos por la Identidad y la Justicia contra el Olvido y el Silencio), en el encuentro realizado el 17, 18 y 19 de agosto en Chaco se conformó un espacio de género dentro de la agrupación, se impulsó la incorporación de la perspectiva de género entre los puntos básicos y un grupo decidió marchar en el Encuentro de Mujeres, Lesbianas, Travestis y Trans de La Plata con la bandera de Hijas.
La Coordinadora de Hinchadas reunió a mujeres, lesbianas, travestis, trans y no binaries de distintos clubes de fútbol para movilizarse juntas. En la columna, las hinchas de Boca Juniors agitaron fuerte con la bandera de “Feminismo Xeneize”, meta bombos y redoblantes.
Las primeras veces
En el encuentro siempre hay una primera vez: la de Giuls Nieto, joven platense no binarie de 19 años que asistió al taller de Sexualidades para seguir descubriendo(se); la de Elisa Pereira, ordenanza de una escuela de La Paz (Entre Ríos) que llegó con sus compañeras de ATE para asistir al taller Mujer y Trabajo e intercambiar ideas; la de Mutante Robin, una artista brasilera que viaja desde hace 4 años y en los últimos dos vive en Buenos Aires, entre la potencia junto a las compañeras y la discriminación hacia les migrantes.
También fue la primera vez del taller de Ecofeminismos, que superó “ampliamente las expectativas” de quienes lo propusieron, contó Natalia Salvático, de Amigos de la Tierra Argentina a LATFEM. “Teníamos asignadas dos aulas (en facultad de Astronomía) pero, por la cantidad de compañeras que se acercaron, abrimos seis comisiones. Estimamos que hubo unas 500 personas debatiendo las confluencias y las sinergias del movimiento ecologista y feminista para ‘contaminarnos’ —en el buen sentido del término— mutuamente las estrategias y luchas de cada movimiento”, agregó.
El encuentro potencia alianzas y estrategias, por eso, del taller de Ecofeminismos esperan garantizar la continuidad del espacio y profundizar nuestros conocimientos, por ejemplo, proponiendo una cátedra abierta de Ecofeminismos y acciones concretas como “empezar a analizar la promoción intensiva de consumo agroecológico, la educación popular ambiental en todos los niveles, el cuidado de la salud y el cuerpo como primer territorio, entre otros debates y discusiones”. Los talleres de Ecofeminismos, como la mayoría, se reconocieron como plurinacionales y apoyaron esta denominación del Encuentro.
Debutó, también, el taller de Activismo Bisexual, coordinado desde el colectivo Bisagra, el domingo 13, tras intervenir en la apertura del taller de bisexualidades con el fin de reclamar el taller histórico que fue invisibilizado porque la Comisión Organizadora cambió el nombre el taller por el de “Mujer y Bisexualidades, Pansexualidades y Polisexualidades”.
Entre los desafíos se habló de: trazar alianzas estratégicas con activistas lesbianas no hegemónicas y otras disidencias del colectivo LGBT, producir materiales pedagógicos para ESI que rompan el binarismo y biologicismo, organizarse para salir encolumnadas en distintas marchas políticas como las del Orgullo o las del 24 de marzo. “Asumirnos como sustantivo (soy bisexual), no solo como adjetivo (me gusta esto)”, acabar con prejuicios como que les bisexuales están “a medio camino” entre lesbianas y heterosexuales.
El próximo Encuentro también será una primera vez porque se realizará en San Luis, una provincia en la que todavía no se había hecho en 34 años. Así lo decidieron las presentes por aclamación en el Estadio Único de La Plata el lunes por la mañana: 2020, 35º Encuentro Plurinacional de Mujeres, Lesbianas, Trans, Travestis, Bisexuales, Intersex y No Binaries en San Luis.
El próximo Encuentro también será una primera vez porque se realizará en San Luis, una provincia en la que todavía no se había hecho en 34 años. Así lo decidieron las presentes por aclamación en el Estadio Único de La Plata el lunes por la mañana: 2020, 35º Encuentro Plurinacional de Mujeres, Lesbianas, Trans, Travestis, Bisexuales, Intersex y No Binaries en San Luis.