Tener un jardín, es dejarse tener por él y su
eterno movimiento de partida. Flores, semillas
y plantas mueren para siempre o se renuevan.
Hay poda y hay momentos, en el ocaso dulce de una
tarde de verano, para verlo excediéndose de sí,
mientras la sombra de su caída anuncia
en el macizo fulgor de marzo, o en el dormir
sin sueño del sujeto cuando muere, mientras
la especie que lo contiene no cesa de forjarse.
El jardín exige, a su jardinera verlo morir.
Demanda su mano que recorte y modifique
la tierra desnuda, dada vuelta en los canteros
bajo la noche helada. El jardín mata
y pide ser muerto para ser jardín.
Pero hacer gestos correctos en el lugar errado,
Amor reclamado en diferencia como
cielo azul oscuro contra la pena.
Gota regia de la tormenta en cuyo abrazo llegas
a la orilla más lejana. I wish you
were here amor, pero sos, jardinera y no
jardín. Desenterraste mi corazón de tu cantero.
Diana Bellessi, El jardín (fragmento)
Llegamos de visita a palacio, nos recibe ella, la arcana III. Sentada en su trono radiante, celestial, ¿es un ángel? ¿una diosa? No, es la reina de todas las reinas, la Madre Tierra plena de abundancia, brillo, la primavera eterna. La Emperatriz florece y hace florecer todo lo que toca con su cetro, de bastos brotado, ilumina lo que ve, el futuro que nos espera en los próximos pasos del camino del Tarot.
Como toda mujer que ocupa un cargo jerárquico sin vergüenza de su poder, sin quedarse callada, tiene sus detractores. La historia de la interpretación del Tarot la tildó de superficial, caprichosa, ¡hasta escuché decir a modo de insulto que la Emperatriz puede ser promiscua! Creo que el principal problema de la bibliografía tradicional es querer leer las mejores virtudes de esta carta desde valores patriarcales. La Emperatriz les molesta por su belleza, juventud, poder y sensualidad. Pero, ¿por qué no haría ella alarde de todo su esplendor? ¿Por qué se mantendría recatada y silenciosa? No es ese su rol. La Emperatriz quiere y tiene, y no piensa disimular. Es una diva, una estrella, una mostra.
Lxs tarotistas contemporáneos reinvidicamos ese lujo desproporcionado, rendimos culto a su opulencia y le gritamos Yassss, Queen! En el podcast de las brujas estadounidenses Amanda Yates García y Carolyn Pennypacker Riggs, Strange Magic, toman a la figura de Beyoncé para definirla. ¡Y claro! Beyoncé encarna el calor venusino, la creatividad y hasta uno de los atributos clásicos de este arcano: la fertilidad —en todos los sentidos—. ¿Cómo no pensar en esa foto de la cantante embarazada rodeada de rosas, con un velo verde translúcido cubriendo su coronilla? ¿O en su look, también embarazada, usando un vestido y una corona dorados para los Grammys? Una verdadera emperatriz.
Pero no solo la Queen B es una emperatriz, la gran mayoría de nuestras íconos pop tienen su vibra: parecen forever young, son bellas, exitosas, talentosas y también inteligentes y grandes estrategas —no olvidemos que la Emperatriz lleva un águila en el escudo, símbolo que se corresponde al aire: dominio de la razón, las ideas, la palabra—. ¿Cuál es entonces la sombra de este arcano? Por un lado, el de Cher y Madonna. La eterna juventud es un plato que se paga caro: cuando queremos mantener el espíritu adolescente (¡y el look de los 20!) probablemente terminemos sometidxs al peso de ese mandato. ¿Se puede? Sí, ellas dos lo demuestran día a día, ambas siguen sexys, actualizadas, intactas, pero no todxs podemos ser las reinas absolutas del pop. Y además, no todxs queremos serlo. El Tarot recién está en su grado III. Nos quedan muchas aventuras por delante para explorar. Si nos anclamos a los ánimos teen de este arcano, probablemente, nos perdamos de descubrir muchos otros estadíos interesantes de nosotrxs mismxs. Por otro lado, hay otra sombra de esta arcana, la tuvimos muy presente en el último tiempo por nuestra amiga Britney. Toda emperatriz tiene su séquito, y ese “entorno” puede comérselas vivas, deglutir su fama, su carisma, exprimirla hasta sacarle no solo su dinero sino también su paz, su salud mental, su fuente infinita, el deseo. Las cortes eran lugares peligrosos para las reinas y las emperatrices. Hoy también hay miles de riesgos y obstáculos en el camino de toda diosa terrenal.
Rosa es mi nombre
rosa soy
una flor
hecha para el amor
un repollo de besos
una rosa matrona
de caderas anchas
dejo caer mis pétalos
sobre la tierra
que me dió vida.
Roberta Iannamico, Tormenta de santa
Otro aspecto fundamental para entender la energía de esta arcana es su conexión con el mundo natural. Aunque ocupa un rol fundamental dentro de la historia de la historia social y la “civilización”, el verdadero poder de la emperatriz radica en su dominio sobre el universo de las flores, las plantas, los animales, el jardín primitivo. La imagino siempre entre enredaderas, cosechando frutos, arrojando semillas a la tierra fresca. De esa relación es que obtiene todos esos recursos que puede poner a disposición de otrxs y de sí misma. No necesita más que amaneceres, árboles, ríos y montañas. Es por esto que muchas veces se la relaciona con la Pachamama, protectora y nutricia, por ejemplo, acercándola a este lado del planeta, donde no se necesitan coronas de oro ni palacios para reinar.
Carta de lectores
¿Cómo activo mi mazo de Tarot? ¡Oh, me gustan mucho estas preguntas porque nos permiten hablar de usos y costumbres, rituales y perfos! Hay muchos mitos acerca del mazo de Tarot como objeto físico y es deber de cada tarotista descubrir en cuáles creer y cuáles descartar. La tradición dice que el mazo “llega” a manos de quien debe tenerlo de compañía, que nos tiene que llegar de regalo, de herencia, de forma casi casual. Me gusta esa mística. Y si un mazo me elige, por decirlo de alguna manera, le presto especial atención. Pero eso no significa que si no te pasa ese evento mágico no puedas ir y comprar tu mazo de forma común y corriente y la cosa no vaya a funcionar. El Tarot está ahí, esperando a que lo interpreten, no hay que manijear tanto.
Otro de los clásicos asuntos sobre el mazo nuevo o que recién llega a nuestras manos es el de la “activación”, ¿qué sería eso? Para traducirlo a una metáfora medio Harry Potter, es algo así como infundirle poder, hacer algún ritual que le confiera sus magias especiales. En mi opinión, puede ser muy disfrutable hacer algo que resuene con nosotrxs para darle la bienvenida a ese mazo, pero no es una condición necesaria. La magia del Tarot no es nada sobrenatural. El “poder” que puede tener, o no, es nuestro, es el poder del diálogo, de la palabra, de las imágenes y su impacto sobre nosotrxs. Así que si no les interesa el mundo ritual, pueden obviarlo. Ahora, si sí les interesa, ¿qué se puede hacer? Una de las performances simbólicas que más me gusta es encender un fueguito (puede ser un sahumo, una pequeña hoguerita de hojas secas en un caldero o un fogoncito real si pueden estar en un lugar seguro de la naturaleza) y sentarse con el mazo a explorarlo bajo esa luz. Meditar sobre el propósito que tenemos como tarotistas, ¿para qué quiero usar ese mazo? ¿voy a leer para otras personas o solo para mí? ¿lo voy a usar como fuente de inspiración? ¿me lo voy a llevar de viaje o voy a tenerlo siempre en mi mesita de luz? Cuando nos hayamos hecho todas las preguntas necesarias, podemos escribir una frase simple y concisa, en presente y afirmando qué vínculo queremos con esas cartas. ¡No la tiren al fuego! Si es posible atesórenla dentro de la cajita del mazo. Lo más tradicional es guardar las cartas en una cajita de madera, envueltas en un paño bordó o morado y poner nuestros cristales favoritos cerca.
Esta es solo una sugerencia, lo que hacemos en nuestros rituales debe ser siempre algo que nos haga eco, inventar un símbolo propio para cada cosa es mucho más poderoso, creativo y divertido que copiar los actos mágicos de otrxs. Pero siempre es bueno tener alguna referencia, investigar y que así nos lleguen las visitas de las musas. Tengo una alumna muy genial que vive cerca de la selva, en el Litoral, ella me escribió hace un tiempo contándome cómo se adentró en la espesura y dejó que la naturaleza le dictara cada paso a seguir. Es una de las brujas feministas más poderosas que conozco. Ojalá pudiéramos dejar todxs que la tierra roja, los ríos, los animales y las orquídeas misioneras nos llevaran paso a paso hacia la magia, ¿no?
Me gustaría recibir sus rituales de activación, si es que los hacen, a mi Instragram @soy.lu.martinez. Pueden mandarme también sus fotos de sus mazos activados. Y más preguntas para esta sección. Abrazo y buen fin de año, que sea con energía de emperatrices.
Para seguir leyendo y escuchando
Poesía (la emperatriz suprema), El jardín, Diana Bellessi, Bajo la Luna.
Esoterismos (bruja pop y feminista, ¿cómo no amarla? Se consigue en The Book Depository en versión física y en Amazon para Kindles). Iniciada, Memorias de una bruja, Amanda Yates García, Grand Central Publishing.
Podcast (uno de los hits de magia, arte y ocultismo pop para darle play). Podcast del Museo Leonora Carrington SLP.
Conocé más de la obra de la ilustradora de La rueda de la fortuna; Seelvana:
